martes, 21 de abril de 2015

Capitulo 12.

Al día siguiente, habíamos quedado para ir a cenar y yo tenia fiesta.
Me levante, me fue a correr, me duche y me fui un rato de compras, quería comprarme algo mono para esa noche, que tanto esperaba, me apetecía muchisimo salir con Niall. Llegue horas mas tarde a casa cansadisima, pero aun así me cambie, y me puse un conjunto que me había comprado (Conjunto), me cambie, y baje abajo, ya que Niall ya me estaba esperando.
Cuando baje el iba guapisimo, se había puesto unos pantalones negros ajustados, con una americana azul marino, una camiseta blanca y las zapatillas blancas, me quede asombrada.
- Buenas noches Nora! Estas guapisima!- dijo y me dio un beso en la mejilla.
- Hola -me sonroje- tu también estas muy guapo.
- ¿Vamos? tengo una sorpresa para ti. - me dijo y me metió en un taxi.
Estaba super nerviosa, no sabia a donde me iba a llevar, ni que íbamos a hacer, a los 15 min de estar en el taxi, paro y nos bajamos y...
- Bienvenida a Nando´s! - dijo señalando a su bar favorito.
- ¿Enserio? - me quede sorprendida, ¿ibamos a cenar allí de verdad?, al principio me quede un poco chafada pero luego todo se arreglo
- Enserio, jaja - se hecho a reír- en realidad, vamos a llevarnos la comida y vamos a ir a mi apartamento, he pensado que ya que la ultima vez estuvimos en un restaurante, ahora algo mas intimo ¿no te gusta?
 Cuando me lo explico, me encanto la idea.
- Si, genial! Me encanta, muy original Niall.
Cogimos la comida y fuimos a su apartamento, en el centro de Londres, era pequeño pero muy bonito y acogedor. Llegamos y los primero que hicimos fue descalzarnos, ya que yo llevaba tacones y bueno... el quería estar mas cómodo. Mientras cenábamos salio el tema de Thomas.
- ¿Has vuelto a hablar con Thomas? -pregunto
- No, no lo he visto mas
- Creo, que deberías hablar con el, ya que bueno, lo dejaste sin ninguna explicación
- Ya, si bueno debería, pero no se que decirle.
- Piensatelo, y cuando lo tengas ves a hablar con el, te aseguro que es mejor.
Estuvimos hablando un rato y cuando acabamos de cenar, el cogió la guitarra y canto una canción, yo que me la sabia empecé a cantar con el, y la verdad es que nuestras voces sonaban bastante bien juntas. Luego nos pusimos una peli, con la que seguimos hablando y al final nos quedamos dormidos. Así es, nos quedamos dormidos los dos en el sofá.